Hace no mucho estuve presente en un pleno extraordinario en San Sebastian de los Reyes, donde se debatía la supresión de la feria taurina entre otras cosas, unos cincuenta taurinos dentro del pleno y cuatrocientos fuera, frente a quince antitaurinos, cámaras de televisión, periodistas y polémica servida. ¿sabéis a quienes hacían caso los periodistas? A la minoría antitaurina, no porque venda mas, sino porque están organizados, dentro de los quince individuos, se podía apreciar su organigrama, jefe de prensa, relaciones públicas, abogado. Etc. Nosotros, muchos, con mucha intención, y con una organización por parte de los aficionados de “SanSe” de puerta grande, pero a nivel de sector, desamparados.
Sírvanse de este ejemplo para dos cosas, para ver la fuerza de la tauromaquia sobre el pueblo que sin estar organizados como sector, no es tan fácil borrarnos de golpe y plumazo, y de igual modo sirva para los que vivimos del sector taurino reflexionemos y actuemos ya.
Los hashtag, están muy bien y ayudan, el fomento de la tauromaquia lo mismo, pero se trata de una actividad de siembra para cosechar a medio o largo plazo. Y señores, compañeros, empresarios, etc. no disponemos de mucho tiempo, hay que reaccionar ya, no esperar al invierno para ver por donde sale el sol.
Se necesita una plataforma conjunta, común, que englobe todos los estamentos que conforman el sector, con profesionales jurídicos, económicos, periodísticos y publicitarios, que trabajen a tiempo completo por el sector, una plataforma que debe ser sufragada por quienes componemos el sector, y no valen excusas, el momento de actuar es ya. Hay que dejar a un lado los intereses individuales y remar por un interés colectivo común, la supervivencia de la TAUROMAQUIA. ¡Compañeros hay que dejar de torear y luchar por el sector, o nadie vivirá del toreo!.
¡Sin unión y buscando soluciones conjuntas es imposible sobrevivir a la marea abolicionista que nos esta llegando! Necesitamos reconstruir el sector, hacerlo viable en las plazas de menor categoría, reducir costes, no depender de ningún tipo ayuda de la administración, incluso pensar en la forma de adaptar progresivamente el espectáculo a lo que demande la sociedad, para evitar perder la esencia, que es torear. Pero para eso se debe trabajar en conjunto, y tener voluntad de dialogo entre todos, desde YA.
PD.: No se tome nadie a mal estas palabras, quiero que sea un punto de inflexión para todos mis compañeros, y profesionales del sector, y se empiece una cruzada taurina ya.
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